Atrincherarse entre las cuatro paredes de su morada ya no es de muermos, sino la última tendencia de moda: el ‘nesting’.
“Nuestras vidas están tan ocupadas, y el mundo a veces puede parecer tan espantoso por las preocupaciones económicas, políticas y ecológicas, que la casa se está volviendo un lugar donde realmente poder relajarnos, un antídoto. Y permanecerá así durante muchos años”. Sigue leyendo